Todo sobre las botas camperas

Si hablamos de botas camperas, hablamos de una bota con denominación de origen. Se origen o uno de sus orígenes en España, es en Valverde del Camino, y se remonta al siglo XIX, su buscaba y se sigue valorando una bota todoterreno, una bota que permite andar por las calles de una ciudad, como ir a una romería de campo, sin perder comodidad, sin perder estilo y siempre con un calzado bien realizado. Estas botas, han conquistado a todo tipo de públicos, descartando el uso de tacones y cuñas, para apostar por ellas en momentos muy significativos. 

Su evolución ha ido caminando a lo largo de los tiempos de la mano de las diferentes etapas de las personas y sus necesidades. Ha ido cambiando desde la piel, al sistema en el que se ha producido o incluso los acabados de las mismas o bien las tendencias que suelen ir marcadas por los remates estéticos. Antiguamente el zapatero las confeccionaba pieza a pieza, pero con la excesiva demanda se empezaron a producir con maquinaria industrial. Evidentemente también cambia la piel con las diferentes modalidades de bota que podemos encontrar, también podemos encontrar muchas tonalidades y con cualidades diferentes cada piel que harán diferente el producto que al final podemos adquirir. La bota inicial, es una bota campera sencilla, con una suela de cuero, con una altura media, y con ciertos pespuntes que suele hacer un dibujo. Ahora la variedad es muy amplia, desde los colores, al grosor de la piel, y los repujados, buscando unas estéticas diferentes para así abarcar a un público cada vez más amplio. 

Las botas camperas originales, no llevan apenas tacón, y suele ser del mismo tono de la bota, algo de color natural, con suela de cuero y con cremallera o no según la persona y sus gustos. Su piel, debe de ser cuidada, limpieza e hidratación es fundamental para tener unas botas que nos duren el tiempo. Son botas que se puedan utilizar de forma diaria, pero entonces te recomendamos que limpies de forma adecuada este tipo de calzado, en relación al tipo de piel con el que está confeccionada, la ventiles debidamente porque si no se fomentará la proliferación de bacterias u hongos, y por supuesto una vez limpia hidratarla con grasa debidamente, esto es lo que pueda hacer que la inversión en esta bota sea mínima, porque tendrá una vida útil muy larga. Además, para esto debemos de tener en cuenta que es un calzado absolutamente atemporal, por lo que nos interesa que nos dure en perfectas condiciones el mayor tiempo posible. 

Y en caso de que tengas que guardarlas durante las épocas más calurosas, te recomendamos que lo hagas metidas en una caja perfectamente colocadas, para que no adquieran ninguna arruga, y sería también recomendable poder rellenarlas de papel, para que no pierdan la forma y para que su horma no se estropee. 

Como ves, un fondo de armario en el que nos damos cuenta invertir algo más de presupuesto y mantenerlo para tenerlo en perfectas condiciones le mayor tiempo posible. 

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