¿Qué recomiendan los podólogos a las embarazadas?

Durante el embarazo, es cuando el cuerpo de una mujer sufre más cambios. El principal es el aumento del peso, que hace que tanto las rodillas como los pies se resientan, por tener que aguantar ese peso extra. Por eso, es muy necesario poner toda la atención durante este tiempo en cuidar la alimentación y hacer ejercicio físico, de acuerdo a las necesidades físicas y a los cambios morfológicos del propio pie en esa época. El calzado ideal para una embarazada, debe de ser firme, pero amplio, que tenga una buena amortiguación y de esta forma prevenir que otras estructuras, como pueden ser la, las rodillas, caderas o espalda se resientan. 

Muchas veces, el pie en esta época se aplana como consecuencia del peso, los tobillos adquieren más volumen y en ocasiones, los pies, cambian la morfología de la pisada. Esto fomenta aún más el dolor en la zona plantar, incluso llegando a generar una fascitis plantar, o incluso llegando a resentir la musculatura de la pierna. 

Es por eso que los podólogos suelen recomendar una serie de consejos para que el riesgo de lesión se reduzca al mínimo. 

Como por ejemplo:  

  • Es recomendado controlar desde el inicio del embarazo el peso, para que en la medida de lo posible no haya un aumento de peso desproporcionado. 
  • Es muy importante, salvo que esté contraindicado por el ginecólogo, huir del sedentarismo, dar largos paseos si se puede por la playa. Esto hace que mejore la circulación. Inicialmente lo más recomendable es andar por la arena mojada, para después pasear con el agua hasta las rodillas de forma que se active la circulación y por último pasear por la arena seca. Que ayudará a dar un masaje en la zona plantar y además tonifica la musculatura de la pierna. 
  • La hidratación de los pies es muy importante, de esta forma, prevenimos la aparición de grietas, y que no aparezcan las durezas. E incluso, sería ideal acudir al podólogo, para que revise los cambios que puedan aparecer en el pie y también realizar alguna exfoliación o pasarnos la piedra pómez.  
  • Evitar estar mucho sentado o tener las piernas colgando, para que no se recarguen las piernas, e incluso es recomendable tener cierta elevación de las piernas tanto si se va a dormir como si se va a estar mucho tiempo sentada. E intentar también no estar demasiado tiempo de pie, para que las  
  • Para acabar el día, siempre sería recomendable un masaje de pies o bien, hacer baños de contraste, terminando con agua fría para mejorar la circulación, y tener controlada la hinchazón. 

Todo esto, son consejos generales, cada embarazada debe de consultar con su ginecólogo, para que le oriente sobre lo que es más recomendado en su estado. Un embarazo siempre debe de ser vigilado por profesionales, pero debemos de atender el cuerpo de una forma global. Son muchas las ocasiones que se nos olvida lo importancia que tienen nuestros pies, lo que soportan día a día, y más cuando se está embarazada. 

Fuente: la web de esta Clinica Podologica Madrid